Publicado en diario La Costa de Pto. Cabello 8-12-2011
Llegó diciembre y con él, llegó el espíritu de la navidad. Tiempo de amor y paz, en que los cristianos celebran el nacimiento de Jesucristo y se hace un corte en la agitada vida cotidiana, para junto a tradiciones religiosas y paganas pasar unos días de reconciliación entre familiares y amigos engordando nuestros cuerpos, corazones y tomando nuevas fuerzas para enfrentar al nuevo año por venir.
Con la navidad reaparecen tradiciones como las del niño Jesús, San Nicolás y hasta Don Regalón, quien por cierto acaba de botar la casa por la ventana junto a sus panas en una de esas tantas cumbres que otrora criticaba al decir que: Los mandatarios se la pasaban de cumbre en cumbre, mientras los pueblos andaban de abismo en abismo, cosa verdaderamente cierta, pero que en realidad se convirtió solo en una de sus tantas incoherencias.
Si bien es cierto que los gobiernos del mundo tienen que buscar la forma de unirse para poder convivir mejor, no es menos cierto que han abusado de la creación de estos grupos, en lugar de corregir y perfeccionar los ya existentes. Por eso tenemos la ONU, OEA, CAN, Mercosur, Unasur, Grupo de Rio, Internacional socialista, Alca, Alba, Grupo de los 20, Grupo de los 3, Celac y sabrá Dios que más está por venir. Ojalá podamos algún día unir a toda la América en un solo grupo, donde la justicia social nos permita vivir en paz y armonía.
Escribo este artículo desde mi ciudad natal y luego de haber disfrutado anoche de ese tremendo cacerolazo, que le dijo a los gobernantes de América, que hay un descontento muy grande y grandes diferencias, entre el mundo que ellos viven y el mundo que viven sus gobernados, por eso no importa donde se escondan, porque los amantes de la libertad, la democracia y enemigos de los abusos y las injusticias, les haremos llegar nuestro descontento, con cacerolas, señales de humo, pancartas, marchas o las letras de nuestras computadoras, las cuales jamás dejaran de escribir, clamando por mas y mas justicia.
Por eso durante este mes hasta los niños escriben tanto al niño Jesús como a San Nicolás, pidiéndole sus juguetes, en una bella tradición de inocencia, donde sus mentes pueden disfrutar de ese mundo imaginario que lleva cada niño por dentro antes de entrar en la cruda realidad de la vida. Entonces está de parte de nosotros de hacer feliz a un niño, así no sea nuestro, con tal que durante el mes de diciembre disfrute del espíritu de la navidad.
Por cierto hay un organismo gubernamental en donde sus funcionarios los agarró de tal forma el espíritu de la navidad, que andan pidiendo a sus allegados una caja de etiqueta negra de 12 años como regalo de navidad. ¡Exigentes los muchachos! Amor sin careta.
No sé qué piensan hacer todos esos precandidatos que andan en campaña durante estos días, lo que sí creo prudente, es que al menos entre el 15 y la llegada de los Reyes Magos hagan un “break” en sus campañas y permitan que sus votantes disfruten de la navidad. Sabemos que Don Regalón acostumbra desde hace varios años a estropearnos estas festividades, pero está de parte de nosotros ignorarlo y prepararnos, para en el dos mil doce revertir todas sus ilegalidades.
En Tucacas ya huele a navidad, a pesar de estar en plena temporada de lluvias, vemos con beneplácito el decorado de la alcaldía y la plaza Bolívar, esperemos ver al ya popular Manuel Méndez con su traje de San Nicolás deleitando a adultos y niños, por eso bajo la lluvia o el sol, preparémonos para disfrutar del espíritu de la navidad.
@willimusk
http://regionorientaldefalcon.blogspot.com
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